Ejercicio mental durante la carrera

¿Has notado que los atletas a menudo hacen gestos como si fuera una forma de atraer la buena suerte?

La verdad es que muchas veces se trata de su propio ritual para aumentar la concentración. De hecho cada runner debería tener el suyo propio.

Antes de una carrera tenemos la adrenalina por las nubes, cuántas veces no somos capaces de dormir antes de una competición? Entrenamientos, dietas sacrificios y luego viene el fatídico día de la carrera. 

Es por esto que se puede llegar con falta de concentración a una carrera no solo por el cansancio físico sino también psicológico. Junto con el entrenamiento físico debemos incorporar un entrenamiento mental. Esto podemos llevarlo cabo de maneras diversas. De hecho hay técnicas de entrenamiento mental equiparables a aquella de entrenamiento físico.

A través del entrenamiento físico el atleta prepara los músculos y el cuerpo para la carrera. A través del entrenamiento mental, sin embargo, es la mente la que se prepara y está libre de toda la serie de pensamientos , sentimientos, estrés y preocupaciones relacionadas con la competición. El rendimiento es sin duda mejor cuando la mente esta libre, relajada y centrada. La preparación mental varía en función de las necesidades individuales, ya que cada atleta es diferente. Para todo encontramos una regla general, en este caso: antes de la carrera o la puesta en escena de nuestro rendimiento físico debemos crear dentro de nosotros mismos la situación mental ideal, el estado de ánimo debe ser tal que permita aprovechar todos los recursos que serán utilizados durante la carrera.

Para ello existe una estrategia que se divide en estas secuencias: – Antes: Necesario para la carrera, estar solo durante unos minutos. – Durante: El atleta debe estar en silencio y preferiblemente con los ojos cerrados La mente debe dirigirse a una memoria de éxito, vinculada a volver sobre la disciplina mental durante toda la carrera incluyendo los sentimientos y las emociones asociadas con esos momentos. Casi automáticamente los recuerdos traen a la mente incluso sabores, olores y sonidos. Una manera de relajarse es escuchar la música adecuada.

Además la respiración juega un papel clave en el equilibrio de nuestra mente. La respiración profunda se lleva a cabo reviviendo un éxito pasado, hay que prepararse mentalmente para revivir un nuevo éxito. Pensar de manera positiva e imaginar como nos gustaría que se viviera la situación que vamos a llevar cabo es una buena forma para prepararnos para la acción.

Este entrenamiento mental no solo es recomendable para maratones o carreras si no para todos los eventos importantes de la vida. Es un protocolo eficaz que realmente ayuda a relajar la mente, llenándonos de energía positiva, utilizando todos los recursos mentales que tenemos a nuestro alcance para triunfar.