MAGNESIO, EL MINERAL ESTRELLA DE LOS CORREDORES

No descubrimos nada nuevo, pero  hemos de rendirle una especial atención. Reservarlo en un lugar privilegiado ya que es un mineral estrella para el organismo de los corredores: el magnesio.

Este es uno de los elementos dietéticos básicos para todo un buen runner. Indispensable, tanto para la población en general, como para, -de manera muy especial- quienes corremos­. En nuestra dieta no nos lo podemos olvidar, ¡nunca!

Como las camisetas técnicas, el magnesio tendría que ser uno de los elementos claves en la ‘bolsa del corredor’. Notaremos su carencia en nuestro organismo si comprobamos que nos aumenta la debilidad muscular, si nos fatigamos incomprensiblemente, si estamos irritables con nuestros amigos y familiares, y sobre todo, si tenemos sueño, estamos somnolientos o nos encontramos sobrexcitados. Si nuestro cuerpo registra  estos síntomas, ¡alarma!, puede ser una señal clara de que necesitamos magnesio.

Pero, ¿por qué es tan importante este mineral? Y ¿por qué, resulta frecuente sufrir su carencia en nuestro cuerpo? El magnesio, junto a otros 15 minerales, forma parte de los nutrientes esenciales para el ser humano. Se necesita y se ha de encontrar en niveles altos en los huesos, en los músculos y en los nervios. Además interviene eficazmente en la producción de energía corporal. ¡Y precisamente esto es lo que más necesitamos quienes corremos y practicamos running! Por desgracia, actualmente resulta bastante complicado conseguirlo por medios habituales, debido el exceso de fertilizantes químicos utilizados en los productos vegetales que consumimos. Pero, aun así,  tenemos recursos para no desproveer a nuestro organismo de este vital elemento. Sobre todo para los deportistas.

En el mercado existen muchos fármacos y específicos que nos repondrán del magnesio que necesitamos. Junto con el fósforo, en forma de fosfato,  crea un tándem perfecto para el buen corredor, ya que su administración resulta especialmente útil para evitar calambres y para calmar dolores.

En su forma natural, el magnesio lo encontramos en el cacao, en el germen de trigo, las almendras, en el perejil, en la soja, en las populares pipas de girasol, en las nueces, las avellanas. Por eso es muy recomendable ingerir periódicamente estos alimentos, baratos y muy accesibles, para optimizar nuestro cuerpo.

Almacenar magnesio es  imprescindible y hemos de cuidar que nuestro organismo disponga de buenos niveles de este mineral, si queremos estar al cien por cien de nuestra capacidad deportiva, sobre todo para correr carreras.

Si a estas ventajas, evidentes para todo corredor o runner, le sumamos que el magnesio tiene un alto poder energizante, -viene  ser como un mejorante de carburante en un vehículo de motor-, comprobamos que el magnesio es, sin duda alguna, una verdadera estrella de nuestra dieta deportiva y que hemos de cuidar.

Un cuerpo equilibrado en magnesio dispondrá de una mayor fuerza muscular, una mejor potencia de impulso en la musculación de las piernas, ganarán fuerza en los tobillos y sobre todo dará flexibilidad de rodillas. Está demostrado que niveles altos de magnesio en nuestro cuerpo favorece el buen funcionamiento de un músculo fundamental para los corredores: el músculo cardiaco (el corazón) y desempeña una función primordial en la relajación muscular, lo que resulta especialmente útil para evitar los temidos agarrotamientos musculares, las rampas, los esguinces y dolores musculares.

Con el magnesio nos encontremos mejor, estaremos más alegres, correremos más felices, nos enfrentaremos a nuestros retos con más optimismo y por descontado, rendiremos más, de un forma natural y no forzada.

Y con el magnesio, nuestra mente también estará más lucida, y nuestro entorno nos lo agradecerá.

¡Viva el magnesio!